Sunday, March 19, 2006
Don Orione... Ven y Verás.
Al decidir donde seguir mi enseñanaza, tres fueron las alternativas que tuve. Una, una beca para estudiar en un colegio llamado English College. Un colegio de carácter pagado que había en Talagante, pero cuya edución no era de mi gusto. Otra, fue otra beca que se me ofreió pra seguir mis estudios en un Colegio de privado de gente con mayores recuersos... pero que tampoco me atraía. pese a que su educación era bastante buena. Pero la diferencia social que había entre esos estudiantes y yo, no me parecía una buena expreriencia... y finalmente Don Orione. Una la escuela católica que entregaba enseñanasa industrial y que estaba en una comuna que estaba a la entrada de Santiago, Cerrillos. Había que postular, hacer examenes.. y bueno, por suerte todo salió bien y quedé. Al principio me costó un poco acostumbrarme a cierta rigides que había. Lo bueno, que la mayoría de mis compañeros eran de mi mismo sector, comunas rurales que quedaban en la periferia de Santiago. Un ex-compañero de la Escuela 20 y yo, fuimos los únicos de Talagante que quedamos estudiando en ella, en esa generación. Nunca nos llevamos muy bien cuando estudiamos en Talagante, ni tampoco cuando lo hicimos en Don Orione. El primer año fue de adaptaión. Las clases, los horarios, el viaje. todos los días tenía que salir a tomar la locomoción al rededor de las 6:30 de la mañana para poder tomar la micro, como se le dice acá, también Taxibus. No siempre tenía suerte que los choferes me llevaran. Algunas veces, tuve que devolverme a casa, ya que no alcanzaba a tomar locomoción, por que no nos llevaban. Eso me daba muchisma rabia.. levantarte tan temprano, algunas veces lloviendo y nada. También, las menos, me salvó de una prueba. El segundo año, tal vez fue uno de los más cruciales de mi vida. Ese año la clase de religión pasó a ser mi clase favorita. Al comenzar ese año, mientras estabamos en la sala desordenando todo, entro el Padre Bruno. Él era el rector del Seminario Orionista que había en Chile. era un hombre muy observador y de una profunda voz. Sabiamos que era italiano y que le había tocado vivir la 2da Guerra Mundial en su querida Italia. Él al ver el desorden, dijo algo que para mi, hasta el día de hoy es ley... "El que no quiere estar en la clase de Regiligión, puede abrir la puerta e irse. Eso si, no puede pretender tener un 7 al final del año, por que lo que corresponde es un 2 como nota. Y terminó diciendo... "Dios nos hizo libres, y como somos libres tenemos derecho a optar. Una vez optado, debemos ser responsables de nuestra opción"... Nunca más se me olvidó aquella frase, que hoy es ley para mi. Desde entonces, la clase de religión pasó a hacer la más importante de todas. Con este impulso, más un libro de Religión para enseñanza media que ordenó el Cardelnal Raúl Silva Herríquez, fueron el puntade mi vida hasta hoy. Este libro, no vio la luz fácilmente, ya que la dictadura de Pinochet, un par de veces paralizó su publicación y distribucón. Pero el Cardenal Silva, nunca dejo de luchar por tenerlo en las aulas católicas. Se le hician modificaciones enblandeciendo sus contenidos, especialmente los referidos a la Doctrina Social de la Iglesia, solo para que estuviera en las aulas. No todos los colegios católicos lo adoptaron como el libro oficial de religión, especialmente los colegios catolicos, cuyas congregaciones eran proclives a la dictadura, como el Opus Dei. Por suerte, los Orionistas, que cuya doctrina era la Caridad que pregonaba su fundador, Luis Orione, de cun salessina, hicieron que tuviésemos este libro. Desde aquel entonces, El Ven y Verás, fue mi libro favorito. En él desccubrí lo mejor de la religión. Una visión de religión cercana a la gente, a sus sufrimientos, a los miedos que viviamos entonces, a las esperanzas que hacian que los que vieramos al rededor no fuera en vano y sobre todo a compreder la visión del Gran Pastor que fue el Cardel Silva Henrríquez... el personaje que más e admirado en la historia de Chile, pero por muy lejos.
Las clases con el padre Bruno no duraron mucho, antes de que terminara el 1er Trimestre de clases del 2do año medio que cursaba, lo cambiaron por otro sacerdote, ya que su labor en la congregación le impedía seguir con el curso. Así se siguieron los años. Ya en 3ro medio, decidí tomar la especialidad de maecánica en máquinas y herramientas, con ramos técnicos, en su mayoría, pero esperando semana a semana la clase de religión, la más importante para mi. El libro Ven y Verás, cambiava año a año, dependiendo del curso en el que estabas... curiosamente, no fue el único que esperaba la clse de religión con ancias. Después supe que varios compañeros esperaban al igual que yo, la clase de religión, por que era el único especio de conversación a cerca de los que Chile vivía entonces. era un espacio de libertadad, de respeto, de díalogo de reflexión.. y cuyo guía era nuestro libro Ven y Verás...
Las clases con el padre Bruno no duraron mucho, antes de que terminara el 1er Trimestre de clases del 2do año medio que cursaba, lo cambiaron por otro sacerdote, ya que su labor en la congregación le impedía seguir con el curso. Así se siguieron los años. Ya en 3ro medio, decidí tomar la especialidad de maecánica en máquinas y herramientas, con ramos técnicos, en su mayoría, pero esperando semana a semana la clase de religión, la más importante para mi. El libro Ven y Verás, cambiava año a año, dependiendo del curso en el que estabas... curiosamente, no fue el único que esperaba la clse de religión con ancias. Después supe que varios compañeros esperaban al igual que yo, la clase de religión, por que era el único especio de conversación a cerca de los que Chile vivía entonces. era un espacio de libertadad, de respeto, de díalogo de reflexión.. y cuyo guía era nuestro libro Ven y Verás...
